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15 de febrero de 2014

Tarta de terciopelo rojo (Red Velvet Cake)

Ésta es una de las tartas más llamativas e irresistibles del mundo de las tartas. Cuando la ves por primera vez alucinas por lo bonita que es y por el llamativo color rojo. Y lo primero que piensas es "madre mía, qué pinta! ¿cómo demonios se hace una tarta así?" (al menos esa fue mi reacción hace años cuando la vi por primera vez, no en tartas, sino en cupcakes, y me pareció lo más complicado del mundo).

Lo primero que te preguntas es "¿cómo se consigue ese color rojo tan intenso?". Con los años descubres los secretos de esta tarta y, al final, llega el día en el que te decides a probar suerte. Y aplicando todo tu conocimiento y dedicando unas cuantas horas, acaba saliendo una delicia de tarta, con muchas cosas a mejorar (normal, siendo mi primera red velvet... no se puede pedir mucho), pero deliciosa al fin y al cabo.

Yo la hice ayer como sorpresa para mi marido por San Valentín, pues por su color rojo es una tarta bastante romántica e idónea para esta fecha, y así variaba un poco, que siempre le hago bombones. La anécdota del día fue que, al verla no se sorprendió en absoluto, y es que, como es daltónico, no se dio cuenta que era de color rojo, sino más bien un color marrón, así que se pensaba que era un bizcocho de cacao, y punto. Un chasco de lo más grande, pero nos reímos un rato :)

En fin, sigamos con un poco de historia, y el origen de esta tarta tiene varias, pero todas ellas en Estados Unidos.

La primera de ellas cuenta que ésta era una tarta exclusiva del Hotel Waldorf Astoria donde, en los años 50, una mujer, fascinada por dicha tarta, pidió la receta al hotel el cual se la proporcionó a cambio de cobrarle una elevada factura al dejar el hotel. Indignada, se dedicó a difundir la receta de la tarta quitando, así, la exclusividad al hotel.

Otra de las historias cuenta que el origen vino por la precariedad que se sufría durante la Segunda Guerra Mundial, donde los reposteros se veían obligados a poner remolacha en la elaboración de pasteles para mejorar el aspecto, dando así ese color rojizo a la tarta.

Y una vez visto ya de donde puede venir, vayamos con la elaboración de la tarta, que ya tendréis ganas.

Tres consejos a tener en cuenta para que os quede un buen color:
  • El colorante ha de ser de pasta, nada de colorante líquido o en polvo, el de pasta deja un color más intenso y resistente a la cocción.
  • El tiempo de cocción es fundamental. Si se hace demasiado, el bizcocho se os va a oscurecer cogiendo un color marrón o de un rojo tan apagado que no va a ser ni bonito. Tenéis que ir controlando muy bien la tarta una vez ya esté en el horno. No os puedo decir un tiempo concreto, pues todo depende del tipo de horno de cada uno. Solo decir que, una vez haya subido y hayan pasado unos 40 minutos, id pinchando la tarta hasta que os salga limpio y entonces retirarla rápidamente. 
  • A la hora de desmoldar y cortar esperad a que se enfríe. Una de las características del bizcocho es que es de lo más esponjoso y, por lo tanto, muy delicado para trabajar porque se deshace fácilmente. Así que tendréis que hacerlo con mucho cuidado y en frío. En mi caso hice 2 bizcochos y los dos los corté por arriba, por abajo y por los laterales, pues son los que se quedan más marrones al llegarle calor más directo. Si lo hacéis así después os quedará un bizcocho con mejor aspecto y de un color uniforme.
Vamos allá!

Ingredientes para el bizcocho
  • 170 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
  • 450 gr. de azúcar.
  • 500 gr. de harina.
  • 3 huevos.
  • 2 cucharadas de colorante en gel o en pasta.
  • 13 gr. de cacao en polvo.
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla.
  • 1 y 1/2 cucharaditas de sal.
  • 300 ml. de buttermilk (leche desnatada o semidesnatada + chorrito de zumo de limón)
  • 1 y 1/2 cucharaditas de bicarbonato.
  • 1 y 1/2 cucharaditas de vinagre.
Ingredientes para el frosting
  • 150 gr. de queso crema (tipo philadelphia o mascarpone).
  • 200 ml. de nata para montar.
  • 75 gr. azúcar glas.
Preparación bizcocho

  1. En un recipiente, mezclamos la leche junto con un chorrito de zumo de limón y lo dejamos reposar.
  2. Precalentamos el horno a 180ºC (arriba y abajo, sin aire).
  3. Cogemos un molde (de unos 23 cm de diámetro, o más pequeño con el que podremos hacer varios bizcochos) y lo engrasamos bien, por la base y las pareces, con mantequilla y harina. 
  4. En un bol, tamizamos la harina, el cacao y la sal. Reservamos.
  5. Cogemos otro bol más grande y mezclamos bien la mantequilla con el azúcar. Batimos con unas varillas hasta obtener una crema homogénea.
  6. Añadimos, uno a uno los huevos y batiendo cada vez (añadir, batir, añadir, batir, añadir, batir).
  7. En otro recipiente, mezclamos el bicarbonato con el vinagre removiendo rápidamente e incorporándolo a la mezcla anterior (mezclar estos dos ingrediente provoca una reacción química rápida de efervescencia, así que hay que ser rápidos en remover bien).
  8. Incorporamos las cucharadas de colorante rojo y la esencia de vainilla. Batimos bien con las varillas hasta que la masa quede de un color rojo intenso y homogéneo.
  9. Colamos la mezcla de la leche con el limón, la cual habrá dejado grumos expulsando el suero de la leche, y la añadimos a la mezcla anterior.
  10. Incorporamos, sin dejar de batir con las varillas, la mezcla de harina, cacao y sal. Con el cacao la intensidad del rojo (que antes tiraba más a rosa oscuro), se vuelve más granate.
  11. Una vez lo tengamos bien mezclado, es hora de poner la masa en el molde.
  12. Hay que llenarlo 2/3 de la capacidad total del molde (puede que os sobre). Yo usé un molde de unos 15 cm de diámetro y me dio para tres bizcochos.
  13. Lo metemos al horno 40-55 minutos. Una vez hayan pasado 35-40 minutos id pinchando el bizcocho y sacadlo rápidamente cuando ya salga limpio.
  14. Dejar enfriar.
  15. Una vez frío, desmoldar el bizcocho, cortar la parte de arriba dejándola plana (suele salir una montañita), los bordes y la base (que suelen quedar más marrones). Si os ha salido ya grueso, podéis partirlo por la mitad con mucho cuidado. Sino, haced otro bizcocho del mismo grosor para ponerlo encima.
Preparación frosting
  1. Mientras está el bizcocho en el horno, podemos ir haciendo el frosting. Montamos primero la nata.
  2. En un bol, mezclamos el queso con el azúcar. Una vez esté bien mezclado, añadimos la nata poco a poco hasta que quede una crema, nada líquida, más bien espesa, moldeable y brillante. Si veis que queda muy líquida, añadid más queso y más azúcar, poco a poco. 
  3. Reservad en la nevera hasta que vayamos a utilizarlo.
Montaje de la tarta
  1. Ponemos uno de los bizcochos como base, encima, ponemos parte del frosting de queso.
  2. Encima, ponemos el segundo bizcocho y más frosting por encima.
  3. Finalmente, recubrir los laterales. Como ya he dicho anteriormente, este bizcocho es muy delicado, así que hay que tener cuidado a la hora de poner el frosting encima de no llevarnos trozos de tarta que ensucien la decoración.
  4. Podemos guardar parte del frosting en una manga pastelera para, una vez tengamos la tarta ya montada, decorarla a vuestro gusto.
  5. Y ya.. a comérsela! Bon appetit!!
La decoración va a la imaginación y gusto de cada uno. Aquí os dejo la de dos Red Velvet que he hecho.





Nota: En los bizcochos podéis poner un poco de almíbar antes de poner el frosting para que sea un poco menos seco. Es lo que yo hice, pero tampoco hace mucha falta, pues la crema ya da bastante cremosidad a la tarta y el bizcocho es muy esponjoso.

22 de diciembre de 2013

Muffins de Chocolate

Aix, madre mía, si nada mas pensar en ellos me entran ganas de volver a hacer más! Si os gusta el chocolate, esta es vuestra receta!!!

La receta la saqué del blog Objectivo: Cupcake Perfecto y de verdad que, aunque nunca había probado de hacer muffins antes, esta me parece realmente deliciosa!

Yo hacía tiempo que quería hacerla, pero no encontraba el momento. Hace dos días me entraron antojos de comerme uno, así que en vez de comprarlo, me arremangué en la cocina y me puse manos a la obra. Y es que un muffin sabe mucho mejor si lo has hecho tu mismo porque, a parte del sabor riquísimo que ya tiene, se suma el placer de poder decir "Oh, Dios mío! pero qué bueno me ha salido! Estoy hecha una artista!" (y lo dices mientras te arrodillas en el suelo, con el muffin cogido con las dos manos y apoyado en el pecho y mirando al cielo con los ojos cerrado mientras saboreas el primer bocado). Si, puede que esté exagerando, pero... estoy segura que alguna vez lo habéis hecho, porque yo sí! xD

Bueno, vayamos por partes. Para no perder la costumbre, un poco de historia. Los muffins (que conste que no es lo mismo que una magdalena o un cupcake. La elaboración, aunque tienen los ingredientes básicos iguales, es dinstinta), provienen de Inglaterra. Su nombre deriva de la palabra moofin, que puede venir de la palabra francesa adaptada moufflet (pan suave). Pueden ser tanto dulces como salados y vienen en una distinta a la de los cupcakes o magdalenas, hechas con papel y con los bordes doblados de manera que queden picos hacia arriba.

Una vez sabido esto, que nunca está de mas, pasamos a la receta, que estaréis deseando saber como se hace para coméroslos lo antes posible! 

Me está viniendo una imagen de la cara de uno de los zombies de la película Guerra Mundial Z que vi ayer con mi marido, cuando intenta comerse a alguien.. así soy yo ante un muffin. Al ataqueeeeeee!!! xD

Ingredientes (12 unidades)
  • 150 gr. mantequilla a temperatura ambiente.
  • 150 gr. chocolate negro troceado finamente.
  • 180 gr. chocolate negro o con leche troceado algo más grueso.
  • 325 gr. harina.
  • 1 cucharadita de levadura química.
  • 1 cucharadita de bicarbonato sódico.
  • 1/2 cucharadita de sal.
  • 1 cucharadita de pasta de vainilla ó aroma de vainilla.
  • 125 gr. azúcar moreno.
  • 2 huevos (tamaño L).
  • 180 ml. de leche.
  • 1 cucharadita de zumo de limón.
  • 100 gr. chips de chocolate blanco, negro, con leche o de caramelo.
Preparación
  1. Pre-calentamos el horno a 180ºC. Preparamos las cápsulas. Podéis usar unas especiales para muffins, o cualquiera de cupcake. Yo, como no tenía ninguna, con papel de horno hice cuadrados y dándole la vuelta a un baso de base con más o menos el mismo diámetro que el molde para magdalenas fui haciendo la forma de las cápsulas.
  2. En un recipiente, mezclamos la leche con el limón y lo dejamos reposar unos 5-10 minutos.
  3. Derretimos los 150 gr. de chocolate negro junto con la mantequilla al baño maría. Seguidamente retiramos y dejamos templar.
  4. En un bol aparte, tamizamos la harina, la levadura química, la sal y el bicarbonato. Reservamos.
  5. Con unas varillas, batimos poco a poco la mezcla de chocolate con el azúcar. Incorporamos después los huevos, uno a uno, la leche, la vainilla y por último la harina tamizada. No ha de quedar una masa tan líquida como suele quedar cuando hacer magdalenas, es más consistente.
  6. Añadimos los 180 gr. de trozos grandes de chocolate y los chips de chocolate blanco (o del que hayáis escogido).
  7. Repartimos la masa en las cápsulas de manera que queden llenas 3/4 partes de su capacidad.
  8. Horneamos unos 25 minutos.
  9. Dejamos templar en el molde y ya podéis coméroslos!

12 de diciembre de 2013

Turrón de Arroz Inflado

Los turrones son unos dulces que se elaboran en época Navideña en toda España. El origen se sitúa en la península arábiga y corresponde a aquellos turrones más tradicionales como el de jijona, o el de alicante. Éste de chocolate con Arroz inflado tiene un origen más actual, pero se ha hecho igual de popular que los demás.

A mi, personalmente, entre todos los turrones, los de chocolate son mi perdición. Los encuentro mas deliciosos, pero quizá sea por mi adicción al chocolate :P
Este, en especial, es muy sencillo de hacer. Así que os animo a que intentéis hacerlo. Incluso, si tenéis pequeños en casa, podéis animaros a hacerlo con ellos. Seguro que les encantará mancharse las manos con chocolate!

Ingredientes
  • 1 tableta (unos 250 gr.) de chocolate fondant (puede ser negro, con leche o incluso blanco).
  • 50 gr. de manteca de cerdo (o de mantequilla).
  • 150 gr. de arroz inflado (yo compré los cereales de arroz inflado con chocolate).
  • un chorrito de licor (en el caso que no vayan a comer niños pequeños. Yo le eché licor 43. Podéis probar con algún coñac).
Preparación
  1. Ponemos en un cazo a fuego lento la mantequilla y el chocolate troceado. Vamos removiendo hasta que acabe de fundirse y retiramos del fuego.
  2. Añadimos el licor y removemos.
  3. En un bol, ponemos el arroz inflado y vertemos el chocolate encima. Mezclamos.
  4. Poner la mezcla en un molde para turrones (yo no tenía, así que utilicé cartones de leche cortados por la mitad y forrados con papel de horno).
  5. Reservar en el frigorífico hasta que solidifique.

17 de noviembre de 2013

Crema Catalana

Para quien no lo sepa, la Crema Catalana o Crema Quemada es un postre muy típico de la cocina Catalana y uno de los considerados más antiguos en Europa en su categoría, a pesar de ser una evolución de las natillas que ya existían muchos siglos antes. Esta crema consiste en una especie de crema pastelera con base en yema de huevo y que se cubre con una capa de azúcar caramelizado. Suele presentarse en cazuelas individuales de barro.

Hay una variante francesa que vinos después y que quizá a muchos les parezca lo mismo es la crème brûlée. La diferencia entre esta y la Crema Catalana és que esta variante se suele cocer al baño maría, a veces se usan los huevos enteros, se usa nata en vez de leche y se aromatiza con vainilla. La suelen quemar con azúcar moreno para compensar el blanco de su versión.

En los territorios de habla catalana, la crema se espesa tradicionalmente con almidón, no incluye nata ni claras de huevo y se aromatiza con canela y limón, incluso en ocasiones con naranja, pero nunca con vainilla.

Para mi este es un postre al que te puedes viciar porque la mezcla de sabores de la crema y el caramelo es realmente deliciosa. Si no lo habéis hecho nunca o no habéis tenido nunca la oportunidad de probarla, os lo recomiendo, pues es muy sencilla de hacer y está muy muy buena!

Ingredientes
  • 1 litro de leche.
  • 6-8 yemas de huevo.
  • 40 gr. de harina de maíz (Maizena).
  • 200 gr. azúcar.
  • 1 rama de canela.
  • piel de 1 limón.
Preparación
  1. Se calienta en un cazo la leche junto con la rama de canela y la piel del limón.
  2. Mientras tanto, en un bol batimos las yemas con el azúcar y la maizena. 
  3. Vertemos la mezcla anterior en un cazo a fuego medio y sin dejar de remover vamos añadiendo la leche ya caliente.
  4. Vamos removiendo hasta obtener una crema espesa y brillante.
  5. Ponemos la crema en moldes individuales de barro o cerámica y dejamos enfriar un poco antes de meterlo en la nevera para que cuaje.
  6. Antes de servirla, espolvoreamos con bastante azúcar y con una pala de hierro o un soplete lo vamos calentando hasta que quede una capa de caramelo. 


30 de agosto de 2013

Churros

El origen de los churros no está claro. Aunque se cree que es de origen árabe, no se sabe a ciencia cierta. Lo que sí sabemos es que en Cataluña se introdujeron en el siglo XIX y hoy en día los podemos encontrar en diferentes partes del mundo como en toda España, Francia, Portugal, Argentina, Guatemala, México, Chile, Venezuela, Colombia, etc. y en cada uno de ellos hechos de distintos modos.

En España tenemos los churros con azúcar o rebozados de chocolate y las porras, que son como churros pero más gruesos.

Esta receta la hice hace tiempo, un día de invierno que me apetecían, pero que ya no había nada abierto para ir a comprar. Así que me puse manos a la obra y los hice. Son muy sencillos y rápidos de hacer. Aquí os dejo la receta.


Ingredientes
  • 200 gr. de harina (de fuerza, si es posible)
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de levadura química
  • 320 gr. de agua
  • Aceite para freír
  • Azúcar
Preparación
  1. En un bol ponemos la harina junto con la sal y la levadura. Mezclamos.
  2. Ponemos el agua a calentar. Una vez llegue al punto de ebullición, retiramos el cazo del fuego y tiramos la harina de golpe y removemos hasta obtener la masa.
  3. Dejamos enfriar.
  4. En una sartén ponemos abundante aceite y calentamos.
  5. Con una churrera (en su defecto nos vale una manga pastelera con una boquilla alargada y de estrella) vamos haciendo los churros y echándolos en la sartén.
  6. Una vez frito el churro, lo ponemos a escurrir y seguidamente lo espolvoreamos con azúcar.

Nota: Los churros es mejor comérselos antes de que se enfríen. Podemos hacerlo junto con una buena taza de chocolate :)

Nota2: Este tipo de masa se puede congelar. Antes de freírlos, podemos poner los churros en una bandeja y congelarlos. Una vez congelados, los podemos meter en una bolsa e ir sacando solamente los que nos vayamos a comer.

Bollos rellenos de manzana (Apple Rolls)

Ahora que estoy viviendo en Suecia, quisiera empaparme de toda la gastronomía de este país. Ya he hecho algunas cosas, pero no se me ocurrió hacer las fotos para luego pasar a este blog la receta. Así que mi primera receta sueca que escriba aquí va a ser ésta.
Encontré la receta en un libro que compré en el aeropuerto, de camino a España, el cual se llama Swedish Cakes and Cookies, libro traducido al inglés del original Sju Sorters Kakor. Es un libro pequeño y compacto, pero lleno de recetas interesantes.
De entre todas las del libro, la primera que he hecho ha sido esta. ¿Porqué? Pues porque la primera vez que probé este bollo aluciné en colores. Fue visitando Skansen con mi hermana, recién habían abierto la panadería y el olor a pan caliente nos atrajo hasta allí. Compramos uno de estos y... hmmm... Era taaaaan suave y esponjoso, taaaaan sabroso! Y aquí está! La verdad es que no me han salido tan buenos, pero están también riquísimos! Y ahí va la receta :)

Ingredientes para la masa (20 bollos aprox)
  • 2 dl. (3/4 taza) Half & Half. (1 taza H&H = 1 taza menos 2 cucharadas de leche + 1 y 1/2 cucharadas de mantequilla derretida)
  • 25 gr. de levadura fresca de panadería.
  • 75 gr. mantequilla a temperatura ambiente.
  • 3 cucharadas grandes de azúcar.
  • 1 huevo
  • Aproximadamente 8dl. (3 y 1/3 tazas)
Ingredientes para el relleno
  • 2dl. (1 taza) puré de manzana
  • 1 cucharadita de cardamomo
  • Huevo para pintar
  • Azúcar perlada para poner por encima
Preparación
  1. Calentamos H&H hasta que esté tibia (37ºC). Añadimos la levadura desmenuzada y removemos hasta que se haya deshecho.
  2. Batimos en un recipiente la mantequilla con el azúcar hasta que quede suave y esponjosa. Añadimos el huevo y la mezcla del punto 1. 
  3. Añadimos la harina y amasamos hasta que esté lisa y elástica.
  4. Poner en un bol cerrado con papel de film y dejar reposar hasta que doble su volumen.
  5. Mientras, en un bol, preparamos el relleno mezclando el puré de manzana con el cardamomo.
  6. Precalentamos el horno a 225ºC.
  7. Estiramos la masa haciendo una forma rectangular y con un cortador de masas redondo de unos 9cm de diámetro, vamos haciendo esferas en la masa. 
  8. Para cada una, la cubrimos con una cucharada de relleno y sellamos la masa. 
  9. En la bandeja del horno, ponemos papel de horno y vamos colocando encima los bollos, dejando el cierre debajo. Los dejamos reposar de nuevo hasta que doblen su volumen. 
  10. Los pintamos con huevo por encima y les ponemos el azúcar perlado.
  11. Horneamos durante 10 minutos.


11 de diciembre de 2012

Canutillos rellenos



Los canutillos rellenos son un postre muy fácil de hacer, rápido y realmente bueno. Yo los hice como acompañamiento para el café de una comida familiar y apenas quedaron unos pocos. Tuvieron muchísimo éxito! 

Así pues, os animo a que probéis hacerlo en vuestras casas, ya veréis que no podréis para de comer!





Los materiales que yo utilicé para elaborar y rellenar los canutillos fueron los siguientes:

6 moldes metálicos, 1 boquilla para rellenar y 1 manga desechable de plástico.

El origen de esta receta lo desconozco, así que pasamos directamente a explicar paso a paso como hacerlos.

Ingredientes

  • 100 gr. aceite de girasol
  • 100 gr. vino moscatel
  • 280 gr. harina de repostería
  • 1 pellizco de sal.
Preparación
  1. Ponemos en un bol el aceite y el vino moscatel. Hacemos una emulsión con la batidora hasta que queden los dos ingredientes formando una sola mezcla homogénea.
  2. Incorporamos la harina y la sal y amasamos enérgicamente.
  3. Una vez tengamos la masa, la estiramos hasta que quede muy fina, la cortamos en cuadrados y los vamos enrollando sobre los moldes. Pegamos los bordes de la masa humedeciéndolos con un poco de agua para evitar que se abran durante la cocción.
  4. A continuación, freímos los canutillos en aceite bien caliente o simplemente los horneamos a 180ºC hasta que queden dorados. Una vez hecha la masa, la desprendemos del molde y, si se han frito, las ponemos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
  5. Rellenamos los canutillos con crema pastelera, nata o crema de trufa y los espolvoreamos con azúcar glas.
Nota: Yo prefiero hornearlos, así evitamos añadir más calorías a la receta y quedan igual o más buenos :)

25 de noviembre de 2012

Cupcakes de chocolate con buttercream de Nutella

Los cupcakes son de origen estadounidense que consiste en un bizcocho individual, normalmente hechos en moldes de magdalenas o del estilo, decorados con una capa de glaseado.

Este dulce surge en el siglo XIX. Antes de que surgieran los moldes para muffins, solían hacerse en tazones, cazuelas de barro, siendo este el significado de su nombre en inglés (cup y cake). También existe otro origen para su nombre, derivado de la forma de medir los ingredientes para su elavoración.

Esta receta la saqué de la web Objetivo: cupcake perfecto, una web que recomiendo a todos los amantes de este tipo de pastelitos.



Aquí os dejo la receta!

Ingredientes para el cupcake
  • 140 gr. mantequilla
  • 115 gr. harina
  • 120 gr. mantequilla
  • 60-70 ml de leche
  • 2 huevos
  • 2 + 1/2 cucharadas de cacao en polvo
  • 1 cucharadita de levadura química
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
Ingredientes para la buttercream de Nutella
  • 150 gr. de mantequilla sin sal
  • 150 gr. de azúcar glas
  • 3 buenas cucharadas de Nutella
Preparación de los cupcakes
  1. Precalentamos el horno a 160ºC.
  2. Preparamos los papeles para cupcakes.
  3. En una jarra mezclamos la leche con el extracto de vainilla.
  4. En un bol tamizamos junta la harina, el cacao y la levadura.
  5. Con la batidora batimos el azúcar con la mantequilla hasta que esté cremoso (cuando se vuelva una crema blanquecina). 
  6. Añadimos los huevos, uno a uno. 
  7. Añadimos la mitad de la mezcla de harina y cacao, después la leche y después el resto de la harina.
  8. Repartimos la mezcla entre los papeles para cupcakes, llenándolos 2/3 de su capacidad.
  9. Horneamos en torno a 22-24 min.
  10. Los retiramos y dejamos templar 5 minutos fuera del horno.
Preparación de la buttercream de nutella
  1. Tamizamos el azúcar glas en un bol y batimos la mantequilla con el azúcar.
  2. Añadimos después la Nutella u batimos hasta que la mezcla esté homogénea y cremosa.
Espero que os gusten tanto como a mi! Bon profiiiit!

18 de noviembre de 2012

Bombones

Desde hace varios años me ha dado por hacer mis propios bombones. 

La verdad es que cada una de las veces que he hecho me han salido bombones de distintos tipos y sabores. Antes de dejaros algunas ideas para hacer los vuestros propios, y para no perder la costumbre, un poquito de historia sobre el bombón.

La historia más extendida que explica los inicios del bombón data del siglo XVIII, cuando el pastelero de Luis XIV le presentó unas frutillas bañadas en chocolate, a lo que el rey respondió "bon bon" en señal de aprobación. De allí surgió el término bombón (doblemente bueno), para referirse a cualquier tipo de chocolate relleno, pero no fue sino hasta principios del siglo XX cuando se popularizaron con la aparición del producto en el mercado estadounidense, a través de los famosos kisses de Hershey's, golosina en forma de gota -recubierta en papel plateado- que aún se comercializa en todo el mundo.

Luego de la creación de esos primeros bombones y de la invención de las trufas de chocolate, de manos del Duque de Plessis-Praslin, artesanos belgas, suizos, italianos y franceses perfeccionaron la elaboración de este dulce a través de técnicas manuales. 

Así surgieron negocios familiares, en los cuales se guardaba celosamente el secreto para la fabricación de las coberturas y de los exquisitos rellenos. Pese a que la industrialización inundó este campo, buscando disminuir los costos y llevar estos productos a un público masivo, aún persisten propuestas artesanales en muchos países, en los que la calidad y la creatividad marcan la diferencia, haciendo que realmente valga la pena pagar un poco más para poder disfrutar de estos exquisitos dulces.

Después de esta  pequeña clase de historia vamos a explicar como realizar un bombón.

Materiales

Lo primero que necesitamos para la realización de este dulce son los materiales. Muchos de ellos, al menos en mi caso, los encontramos normalmente en la cocina (cazos, cucharillas pequeñas de café, espátulas...). 
Lo único que puede que tengáis que comprar sean los moldes y las cápsulas para poner los bombones una vez hechos. De moldes hay de muchos tipos y clases. Yo los prefiero de silicona, son los más comunes y los que mejor van para después desmontar el bombón.

Moldes de silicona

Cápsulas

Ingredientes 

(obligatorios)
  • Chocolate negro fondant
  • Chocolate con leche fondant
  • Chocolate blanco.
(opcionales para el relleno)
  • nata líquida para cocinar
  • aroma de limón
  • aroma de naranja
  • aroma de almendra
  • whisky
  • cerezas confitadas
  • dulce de leche
  • avellanas
  • almendras
  • etc.
(opcionales para decorar)
  • cacao en polvo
  • fideos de chocolate
  • bolitas de colores
  • avellana
  • almendra
  • oro en polvo
  • etc.
Para el relleno y la decoración cada uno puede echarle imaginación y hacerlos como quiera.
Las cantidades de cada cosa las podéis hacer a ojo.

Preparación

Para la cobertura de los bombones:
  1. Ponemos en un cazo al baño maría el chocolate negro/con leche/blanco troceado. 
  2. Removemos de vez en cuando hasta que se derrita.
  3. En el molde añadimos un poquito de chocolate fundido y con una cucharilla vamos remojando las paredes hasta que queden todas cubiertas. Normalmente, lo que se debería hacer es rellenar todo el molde con el chocolate y después darle la vuelta y dejar que vaya cayendo. Así quedan las paredes empapadas. Yo no suelo hacerlo así porque de este modo me queda poco espacio para el relleno.
  4. Una vez empapadas las paredes de los moldes, los metemos en el congelador hasta que se endurezca el chocolate.
  5. Sacamos del congelador y rellenamos los bombones sin dejar que el relleno llegue hasta arriba del molde, pues necesitamos tapar el bombón. Depende del tipo de relleno, aconsejaría que lo dejárais unos minutos en el congelador para que se endureciera y no se mezclara con el chocolate que lo cierra.
  6. Para taparlo, ponemos más chocolate fondant por encima. Aquí da igual si sobresale, pues una vez tapados todos los bombones, con una espátula, arrastráis el chocolate sobrante hasta quitarlo.
  7. Lo metéis otros minutos más en el congelador hasta que se endurezca.
  8. Lo sacamos del congelador, lo desmontamos y ponemos cada bombón en una cápsula.
Para el relleno:

Os daré algunas ideas básicas. Una vez con ellas, podéis hacer los rellenos que queráis.

El chocolate fundido, una vez frío, queda duro. Para que el relleno quede más esponjoso podéis hacer una ganache.
A mi me gusta que ésta sea de chocolate con leche. Y el bombón aun queda mejor si la cobertura es con chocolate negro.
La ganache se hace básicamente calentando nata líquida en un cazo y, una vez hervida, añadir el chocolate con leche en virutas, sin dejar de remover, hasta que se forme una masa brillante y espesa.
Para rellenar los bombones podéis hacerlo poniendo la ganache en una manga pastelera. De este modo os será más fácil.
Bombones con ganache
Para hacer un chocolate con sabores, podeís añadir una o dos gotas de aroma de limón, naranja, almendra o vainilla y remover bien (yo uso las que son de la marca vahiné y que las podréis encontrar en cualquier supermercado tipo carrefour, caprabo, etc.)

Podéis añadir algún fruto seco en el interior que acompañe al sabor del bombón. Por ejemplo, si lo hacéis de aroma de almendra, podéis poner almendra dentro o encima del bombón. O si lo hacéis de aroma de naranja, añadir un trozo de naranja confitada.

También podéis rellenarlos directamente con productos ya preparados, como caramelo, dulce de leche ó miel.

Para los bombones de licor... yo antes los hacía añadiendo una cereza confitada y un chorrito de licor, pero a la hora de taparlo no acababa de cerrar bien y el licor salía por los lados. Los últimos que he hecho he optado por añadir el licor al chocolate directamente.

Hay muchas maneras y muchos ingredientes para rellenar los bombones, así que solo hay que echarle imaginación y experimentar! Y no tengáis miedo en hacerlo. Cuando se trata de chocolate... ¡cualquier combinación está buenísima!

Decoración:

Esto es lo mismo que el relleno. Cada uno puede usar su imaginación para decorar los bombones. 

Existen productos como oro en polvo que se ponen con un poco de agua y esta mezcla se usa para pintar el molde antes de poner la cobertura dentro. Así, una vez hecho el bombón, queda "pintado".
Yo no lo he hecho nunca. Nunca he comprado oro en polvo ni nada parecido, pero he visto algunos y quedan muy bien.



Tarta de Chocolate del Misisipi


El origen de esta tarta lo desconozco, aunque algunos dicen que es española, yo no sé si ponerlo o no en duda.

Lo que si sé es que, desde el día que la vi en un libro de postres que me regalaron, quise hacerla, y una vez hecha para una cena de amigos, pensé que era digna de publicarse en este blog y ponerla a la altura de los brownies de oreo!






Aquí os dejo la receta!

Ingredientes (8 - 12 personas)

Masa

  • 250 gr de harina y un poco más para espolvorear
  • 2 cucharadas de cacao en polvo
  • 140 gr de mantequilla
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 2 cucharadas de agua fría
Relleno
  • 175 gr de mantequilla
  • 250 gr de azúcar moreno
  • 4 huevos ligeramente batidos
  • 4 cucharadas de cacao en polvo, tamizado
  • 150 gr de chocolate negro fondant
  • 300 ml de nata líquida para cocinar
Para adornar
  • 425 ml de nata extragrasa montada
  • copos y virutas de chocolate
Preparación
  1. Para la masa, en un cuenco tamizamos la harina y el cacao. Incorporamos la mantequilla y trabajamos la mezcla con los dedos hasta obtener una consistencia como de pan rallado. Añadimos el azúcar y el agua fría para compactar la pasta. La envolvemos en papel de film y la dejamos reposar 15 minutos en el frigorífico.
  2. Extendemos la masa en una superficie enharinada y forramos con ella un molde redondo desmontable para tarta de 23 cm. Extendemos por encima papel vegetal  y esparcimos unas legumbres secas para evitar que la masa suba. Cocemos la base de la tarta en el horno precalentado a 190 ºC unos 15 minutos. Retiramos después las legumbres y horneamos 10 minutos más.
  3. Para hacer el relleno, batimos en un bol la mantequilla con el azúcar y vamos añadiendo el huevo y el cacao en polvo. Derretimos el chocolate y lo incorporamos a la mezcla, batiendo bien. Hacemos lo mismo con la nata.
  4. Bajamos la temperatura del horno a 160 ºC. Vertemos la crema en la base y cocemos la tarta 45 min. o hasta que el relleno cuaje.
  5. Dejamos enfriar del todo la tarta y la ponemos en una fuente. La recubrimos con la nata montada y la decoramos con copos y virutas de chocolate. 
  6. La dejamos en el frigorífico hasta que se vaya a servir.
Nota: La base salió demasiado dura y con mucho sabor a harina. Personalmente, la próxima vez que la haga, la base la haré de galleta.

3 de abril de 2012

Tarta de bizcocho con manzanas

¿Quién no ha probado, visto o hecho una tarta de manzana en toda si vida? Es una de las tartas más conocidas del mundo.

El origen de la tarta de manzana es desconocido, aunque se cree que apareció espontáneamente en Europa  donde existía una tradición de tartas con relleno y donde se cultivaban manzanas.

Hay muchos tipos de tarta de manzana, algunas de ellas, además de manzana, se le añaden pasas o crema y pueden aromatizarse con canela, nuez moscada y clavo de olor. O perfumar con zumo de limón, ron u otros licores. Las masas empleadas pueden ser de hojaldre o quebrada


La masa de esta tarta es de bizcocho y solamente se rellenará de manzanas.

Ingredientes
  • 130 gr. de mantequilla a temperatura ambiente (y un poco más para engrasar el molde)
  • 200 gr. de harina de repostería (y un poco más para espolvorear el molde)
  • 6 manzanas reineta
  • 3 huevos
  • 150 gr. de azúcar
  • 2 cucharadas de brandy
  • 1 sobre de levadura química
  • 1 pellizco de sal
Preparación
  1. Precalentar el horno a 180º.
  2. Engrasar con mantequilla un molde de 28 cm de diámetro, espolvorear ligeramente con harina y reservar.
  3. Pelas las manzanas y partirlas en 4 trozos. Cortar cada trozo en lonchas finas sin separarlas. Reservar.
  4. Poner en un bol los huevos y el azúcar y remover enérgicamente hasta crear una pasta.
  5. Agregar la mantequilla y el brandy y mezclar.
  6. Añadir poco a poco mientras removemos la harina tamizada. Añadimos la levadura y la sal. Podemos ayudarnos de la minipimer si incorpora unas varillas.
  7. Verter la mezcla en el molde y golpeamos suavemente sobre la encimera para que la masa se distribuya bien, la superficie quede regular y no se formen burbujas de aire en el bizcocho. 
  8. Colocar encima los cuadrados de manzana, unos al lado de otros, con los cortes hacia arriba.
  9. Introducir en el horno durante 25 ó 30 minutos. Para comprobar que está correctamente horneado, antes de retirarlo del horno, introducimos una varilla o un cuchillo fino en el centro del bizcocho. Si la cocción es correcta, deberá salir limpio.
  10. Retirar del horno y dejar enfriar antes de desmoldar.
  11. Una vez frío, espolvorear la superficie con azúcar glass.
A mi no me suelen gustar los pasteles de manzana, pero he de decir que este está muy bueno y es de los pocos en los que he comido más de un trocito : p

Trufas heladas de chocolate



La trufa es un dulce de aspecto y sabor similar a la de un bombón.

La trufa tradicional se originó en Bélgica y fue llamada trufa porque la forma y la textura se parece mucho al de la seta del mismo nombre.

Realmente este dulce es uno de los más deseados por los amantes del chocolate. Son irresistibles, tentadoras y.. una vez pruebas una.. ya no puedes dejar de comer.

No son para nada difíciles de hacer y son ideales para cuando viene visita a tomar el café o como regalo de san valentín.






Ingredientes (30-40 unidades)
  • 100 gr. de nata líquida
  • 150 gr. de chocolate fondant
  • 150 gr. de chocolate con leche fondant
  • 50 gr. de brandy o whisky
  • Cacao en polvo
  • Fideos de chocolate para rebozar
Preparación
  1. Ponemos la nata líquida en un cazo y calentamos a fuego medio.
  2. Mientras, cortamos los chocolate en virutas.
  3. Cuando la nata empiece a hervir, añadimos el chocolate y removemos hasta que se cree una pasta brillante.
  4. Incorporamos el brandy y removemos.
  5. Ponemos la ganache en un cuenco y lo metemos en el congelador hasta que la masa se solidifique.
  6. Cuando esté lista, con ayuda de dos cucharillas, hacemos bolitas y las rebozamos con cacao en polvo o son fideos de chocolate.
  7. Las servimos en cápsulas de papel.
Es imprescindible conservar las trufas en el congelador hasta que se vayan a consumir.

Para poder hacerlas de manera que los niños también puedan comerlas. Podéis prescindir del brandy. Están igual de buenas.

Si os gusta experimentar, existen aromas de vainilla, almendra, limón, naranja, etc. que podéis sustituir por el brandy y os quedarán trufas de distintos sabores :)

8 de julio de 2011

Helado de limón

Ya ha llegado el verano y, con éste, el calor sofocante. Para estas fechas solamente apetece tomar cosas frescas.
Hoy he hecho helado de limón. Es una receta sencilla que he encontrado por internet y que queda bastante bien. Está realmente bueno!

Está claro que el origen de los helados es muy antiguo. Hay quienes sostienen que los antiguos romanos son los inventores del “sorbete”. Ellos utilizaban nieve, frutas y miel para preparar este refrescante postre. Lo cierto es que los conocían y disfrutaban, los chinos, turcos, árabes y romanos.

Los cocineros árabes, de los Califas de Bagdad, se destacaron en refinar la calidad y variedad de estos, incorporando a la preparación zumos de fruta. A estas mezclas le dieron el nombre de "sharbets", que quiere decir bebida, de allí el nombre sorbete empleado hoy en día.


Se atribuye a Marco Polo el haber divulgado en Italia una receta para su preparación de regreso de uno de sus viajes al Lejano Oriente. Esto apoyaría la idea de que fueron los chinos quienes inventaron los helados, pero como es desde Italia que se hacen conocidos en el mundo, se explica que muchos crean que se originaron en Roma. Se ha llegado a decir que el nombre de los helados llamados "polos" se puso en homenaje al legendario Marco Polo.


Ingredientes
  • 250 ml zumo de limón
  • 200 gr azúcar
  • 250 ml agua
  • 2 claras de huevo
Preparación
  1. Vaciamos los limones.
  2. Pasamos la pulpa por un chino para coger todo el zumo. Si no se dispone de un chino, se puede exprimir directamente el limón antes de vaciarlo y después quitarle la pulpa.
  3. En un cazo, ponemos el agua y el azúcar y lo hacemos hervir durante unos 3 minutos. Lo apartamos y lo dejamos enfriar.
  4. Una vez frío, añadimos el zumo de limón y mezclamos.
  5. Introducimos la mezcla en el congelador y, cuando esté a medio congelar, montamos las claras de huevo y las mezclamos con la preparación anterior.
  6. Volvemos a congelar la mezcla y cuando tenga consistencia rellenamos los limones y congelamos de nuevo. 
Nota:
El ir removiendo la mezcla en el proceso de congelación evita que se formen grandes cristales de hielo, por eso se recomienda ir removiéndola cada cierto tiempo.

    13 de junio de 2011

    Merengue de limón

    Esta es una receta facilísima. A mi me encanta el merengue y, cuando me sobran claras de huevo cuando hago algún plato, hacer merengue es una buena manera de aprovecharlas sin tener que tirarlas. Esta es la primera vez que hago merengue de limón. En mi caso, lo he hecho al horno, aunque puede comerse tal cual.

    La teoría o leyenda con más fuerza dice que fue inventado alrededor de 1600 por el pastelero italiano Gasparini, residente de Meiringen, pueblo suizo, de ahí su nombre. Otra teoría dice que fue obra de un cocinero al servicio del rey polaco Estanislas Leszczynski, a partir de una receta alemana, y que provendría de la palabra polaca "Marzynka". Lo que sí es seguro es que los primeros merengues en Francia se sirvieron en Nancy, en la corte de ese mismo rey polaco. La hija de dicho rey era muy golosa y entusiasta de esa receta, al casarse con Luis XV, la puso de moda en la corte francesa.

    Hasta principios del siglo XIX los merengues se moldeaban con una cuchara antes de meterse en el horno (lo que en España se llama suspiros). La actual forma de hacerlos con la manga pastelera fue introducida por Antoin Carême, cocinero francés.

    Existen varios tipos de merengues
    1.  Merengue francés o merengue: Es el merengue básico, se realiza batiendo las claras y añadiéndole el azúcar. A las pocas horas de montarse se baja.
    2. Merengue italiano: Para realizarlo se utiliza almíbar en punto de bola (116º), en vez de azúcar, necesitándose 30 gr. de azúcar por clara. Se mezcla con las claras batidas, echándolo en forma de hilo mientras todavía está caliente, con esto logramos que estas se cocinen un poco y que se mantenga firme durante bastante más tiempo que el anterior. El resultado final es algo más duro que el merengue francés y brillante. Dura varios días sin bajarse. Es el más indicado para mouses, suflés u otras preparaciones aireadas.
    3. Merengue suizo: Este merengue se realiza batiendo las claras con el azúcar en un recipiente al baño María, durante unos diez minutos. Se logra un merengue más firme que los anteriores y brillante. Habitual en el relleno de tartas o frutas.
    4. Merengue chino: En Asia ha evolucionado y hay merengues con diferentes condimentos. En 2007 en un popular restaurante de China se comenzó a ofrecer a los consumidores este alimento.
    Pues bien, aquí os dejo la receta del día. Un merengue francés de limón :)

    Ingredientes
    • 4 claras de huevo
    • 1 + 1/2 taza de azúcar
    • Una gota de extracto de limón
    Preparación
    1. Se ponen las claras en un bol y se montan las claras a punto de nieve con las barillas de la batidora.
    2. Una vez montadas y bien apelmazadas de modo que al dar la vuelta al bol no se caigan, se le añade el azúcar y la gota de limón.
    3. Se sigue batiendo hasta que quede un merengue brillante y apelmazado.
    4. Se mete el merengue en una manga pastelera y se va colocando en los moldes.
    5. Se calienta el horno durante 15 minutos a fuego lento, introducimos los moldes en el horno con el fuego a potencia mínima durante 10 minutos.
    Nota:
    Al meterlo en el horno, el calor dilata las burbujas de aire y evapora el agua, por lo que se esponjan. A la vez, se coagula la albúmina y el resto de proteínas dando rigidez al exterior. Si durante el horneado abrimos la puerta, la diferencia de calor puede hacer que las burbujas de aire, dilatadas por el calor, se deshinchen. Al volver a cerrar la puerta las proteínas se solidificarían antes de que a las burbujas de aire les diese tiempo a volver a subir.

    Con el horno abierto podemos obtener un merengue duro en vez de esponjoso como el que he hecho yo hoy. Otro día probaré a hacer los demás tipos de merengues y ya os diré qué tal.

    11 de junio de 2011

    Brownies de Oreo

    Cuando encontré esta receta me enamoré de ella. Si ya me gustan de por sí los brownies de toda la vida, imagináos con galletas Oreo!!! Así pues, rápidamente he probado de hacerla y... no hay palabras para describir lo buenos que están!

    El origen del brownie con nueces se ubica en Estados Unidos mas o menos por el año 1897. Fué fruto de un accidente culinario, un error de un cocinero que olvidó poner levadura al bizcocho de chocolate que estaba elaborando. Así pues, este bizcocho crujiente por fuera y tierno y jugoso en su interior, se bautizó con el nombre de brownie (marroncito).

    Pues bien, aquí os dejo la receta de esta versión del brownie. Espero que os guste!!

    Ingredientes
    • 165 gr. de mantequilla.
    • 200 gr. de chocolate negro fondant.
    • 3 huevos
    • 2 yemas de huevo
    • 1 vaina de vainilla.
    • 100 gr. de azúcar blanco.
    • 65 gr. de azúcar moreno.
    • 2 cucharadas de harina.
    • 1 cucharada de cacao en polvo.
    • 1 pizca de sal.
    • 154 gr. de galletas Oreo.
    • Azúcar glas.
    Preparación
    1. En un cazo ponemos la mantequilla y la derretimos a fuego medio. Seguidamente añadimos el chocolate picado y lo dejamos fundir a fuego suave hasta que esté totalmente fundido y con una textura homogénea.
    2. Abrimos la vaina de vainilla por la mitad y sacamos las semillas, reservamos.
    3. En un bol, batimos los huevos y las yemas junto a a las semillas de vainilla, hasta conseguir que adquieran una textura esponjosa, de color pálido y que hayan aumentado su volumen.
    4. Seguidamente añadimos el azúcar en dos adiciones, batiendo bien después de cada una.
    5. A continuación, añadimos el chocolate fundido, la harina, la sal, el cacao en polvo y mezclamos suavemente, para no eliminar el aire  de la masa.
    6. Finalmente incorporamos las galletas Oreo, picadas en trocitos pequeños, y lo volvemos a mezclar hasta que queden totalmente integradas en nuestra masa.
    7. Pasamos nuestra mezcla al molde donde lo vayamos a hornear, el cual habremos engrasado previamente, y lo horneamos durante unos 25-30 minutos a 180º.  Nos debe de quedar el centro ligeramente pegajoso.
    8. Transcurrido el tiempo, lo dejamos enfriar en el molde, y una vez frío, lo sacamos y lo espolvoreamos con un poco de azúcar glas.
    Nota:
    A mi se me ha olvidado poner la sal y no ha pasado nada, han quedado buenísimos! :D:

    9 de junio de 2011

    Chips Ahoy


    A petición, hoy os pondré la receta de estas galletas que tanto gustan. He de decir que estas no són como las originales, pero siguen estando buenísimas.
    Como siempre, un poco de historia antes, aunque tampoco es que haya mucha:

    Las Chips Ahoy nacieron en 1963 con una receta única. En España hace nacer la categoría de cookies en los años 90. Una galleta artesana de calidad reconocida, crujiente y deliciosa, elaborada con pepitas enteras de chocolate de verdad. 

    Pues nada, aquí os dejo una de las recetas que he probado de hacer. Bastante rápida y fácil. 

    Ingredientes
    • 150 gr. de azúcar moreno
    • 150 gr. de azúcar blanco
    • 125 gr. de mantequilla
    • 2 huevos
    • Extracto de vainilla
    • 340 gr. harina
    • 1 cucharadita de bicarbonato
    • 150 gr. chips de chocolate.
    Preparación
    1. En un bol, mezclamos todos los ingredientes hasta que quede una masa espesa.
    2. En una bandeja, la forramos con papel sulfurizado y hacemos pequeños montoncitos de masa, dejando una separación de unos 3 o 4 cm entre ellos, pues la masa se va aplanando y ensanchando.
    3. Precalentamos el horno a 180ºC.
    4. Hornearlas durante unos 10-15 minutos. Hay que retirarlas del horno cuando aun estén blanditas o cuando empiecen a dorarse. Si nos pasamos de cocción quedarán duras, si las retiramos demasiado pronto, crudas, así que hay que ir controlándolas.
    5. Retirarlas del horno, dejar enfriar y ya estarán listas para comer!
    Nota:
    En mi caso, en vez de poner 150 gr. de chips de chocolate, puse 200 gr. Utilicé dos bolsas de perlitas de chocolate de la marca Vahiné.

    8 de junio de 2011

    Tortitas Americanas

    Esta mañana me he levantado temprano para preparar un desayuno típico americano. Las tortitas, panqueques o Pancakes. Hacía tiempo que quería hacerlas y por fin me he decidido.

    Esta receta aparece mucho tiempo atrás, aunque inicialmente algo mas sencilla. Durante las celebraciones de Semana Santa, la iglesia prohibía comer ciertos alimentos, no solamente la carne, también los huevos, la leche, la manteca y el queso.
    Como había que comer algo, y así se crean los Pancakes. Se mezclaba harina de trigo con agua y esta pasta se extendía en finas capas sobre piedras calientes para cocinarla.
    Mas adelante, al quitar las prohibiciones, la iglesia autorizó incluir en la dieta estos alimentos. De este modo, a la mezcla original se le añadieron huevos, leche y mantequilla y se empezaron a cocinar en sartén, de ahí su nombre.
    La costumbre era preparar para el primer martes de ayuno pilas de pancakes.

    Pues bien, una vez conocida la historia, os dejo la receta:




    Ingredientes para 20 tortitas
    • 300 gr. de harina
    • 25 gr. azúcar lustre
    • 4 huevos
    • 0.4 litros de leche
    • 1 + 1/2 cucharadita de levadura en polvo
    • 25 gr. de mantequilla
    • 2 cucharadas de vainil·lina
    • Anís
    Preparación
    1. En un recipiente batimos, dos de los cuatro huevos, el azúcar y una tercera parte de la leche.
    2. Añadimos poco a poco la harina tamizada, para evitar grumos, mezclándola bien con la varilla y vamos agregando la leche batiendo con energía.
    3. Añadimos la esencia de vainilla o vainil·lina, la levadura en polvo, la mantequilla fundida y un chorreón de anís.
    4. Montamos dos claras a punto de nieve y las añadimos a la mezcla removiendo suavemente. Esto permite que la tortita quede más esponjosa.
    5. En una plancha no muy caliente, o a falta de una utilizar una sartén antiadherente a fuego lento, y ligeramente engrasada, vamos echandoos la mezcla de modo que nos quede una tortita con más o menos 10 cm de diámetro.
    6. Una vez dorada le damos la vuelta con ayuda de una espátula y se deja dorar por el otro lado.
    Degustación

    Se suelen comer calientes acompañadas de nata montada azucarada, siropes, confituras, miel, chocolate líquido o jarabe de arce, aunque se pueden acompañar con lo que se quiera, incluso comer solas.

    Nota:
    El anís es un ingrediente que he añadido a la receta para darle algo mas de gusto y no han quedado nada mal. Es totalmente opcional.